¿Vodka en caballitos de hielo? No, m'hijo, eso ya no es lo de hoy. Aquí va lo último en continentes etílicos.

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Adquiéranse, enjuáguense, desinféctense unas cuantas fresas de buen tamaño.
Retírenseles las hojitas. Excávense ligeramente para formar una cavidad parecida a la de un caballito.
Hágase un corte en el extremo opuesto, para que la fresa pueda sostenerse sobre un plato.
Llénense las cavidades con su licor preferido. Bébase e ingiérase.

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Licor de coco, en esta ocasión. Combinación ganadora.

4 Comments:

  1. Colibrí said...
    recién descubro tu maravilloso y gastronómico blog...
    gracias por refrescar la blogósfera

    saludos
    grabiel said...
    Mataría por tres de esos en este instante, pero tengo el lomo partido, tanta tarea como si estudiara letras inglesas y tanto trabajo como si me fueran a pagar mañana.

    ¿Me llevas unos mañana a la fac?

    Saludos.
    Anónimo said...
    Un gustote volver, volver, volver, a sus brazos de ustedes otra vez.

    Adictvm, esa sandía está causando furor, me he de conseguir alguito que celebrar este fin para poder inyectarla-congelarla-probarla.
    ebarrera said...
    La idea de pasar un par de horas lavandocortandoagujerando fresas para tan solo ponerles una gotita de vodka (bueno, las fresas tamaño Chernovil no se me antojan) es poco atractiva. Hya alcoholicos en este mundo que preferirian poner la vodka en una copa para martini y deja la fresa en el fondo como si fuera la aceituna.
    Slaintè!
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    "I pray god it's our last"

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